La Linux Foundation Public Health está preparando el primer pasaporte internacional COVID-19

La Linux Foundation Public Health dio a conocer hace ya varios dias sus intenciones de lanzar una iniciativa para permitir la verificación interoperable y confiable de certificados COVID, ya que durante los últimos meses han estudiado los casos de los gobiernos que han comenzado a diseñar e implementar sistemas de certificados COVID, incluido el Certificado COVID digital de la UE (anteriormente el Certificado Verde Digital de la UE).

El mundo entero ya lleva año y medio luchando contra el coronavirus, una situación de salud que ha provocado la pérdida de casi 4 millones de vidas. En tal contexto, las vacunas han dado muchas esperanzas para controlar la pandemia, o incluso hacerla desaparecer. Muchos pensaron que la mayoría de las personas se vacunarían, pero los hallazgos son bastante decepcionantes en comparación con las expectativas.

Esto se debe en parte a la escasez en muchos países, pero también a la desinformación y la paranoia sobre estas vacunas. Incluso en los círculos más altos de intelectuales, se pueden encontrar personas que argumentan que las vacunas están destinadas a implementar programas pésimos.

A través de conversaciones y los estudios, mencionan que han identificado dos desafíos críticos de los cuales el principal es la falta de una arquitectura de confianza global, un sistema que los verificadores de una jurisdicción puedan utilizar para tomar una decisión sobre si aceptar o no un certificado firmado por otra jurisdicción.

Todavía hay muchas preguntas que los encargados de formular políticas gubernamentales y los equipos de tecnología tienen sobre cómo construir y administrar sistemas de certificados COVID, ya que las ofertas de los proveedores en este espacio aún son muy nuevas y los estándares aún se están finalizando.

Ante todo esto la Linux Foundation Public Health (LFPN) ya trabaja en el Global COVID Certificate Network, una especie de registro confiable que ayudará a probar el estado de la vacuna.

Esta Red Global de Certificados COVID (GCCN), se anuncia como «una iniciativa para permitir la verificación interoperable y confiable de certificados COVID entre jurisdicciones para la reapertura segura de fronteras». Organizaciones, gobiernos, desarrolladores y muchos más trabajarán con la fundación para crear una red y un protocolo de registro global confiable que facilitará la verificación de la validez de los diferentes certificados de vacunación emitidos por diferentes países. Este es un pasaporte internacional Covid-19.

Como explica Brian Behlendorf, CEO de la Fundación Linux para Blockchain, Salud e Identidad, la GCCN es vital, porque «la primera ola de aplicaciones para demostrar su estado COVID no logró mostrar esta prueba más allá de un solo estado o una sola nación». La GCCN resolverá este problema «respetando el alto nivel de confidencialidad e integridad».

Además la LFPH se está construyendo en parte para ser compatible con el Certificado COVID digital de la UE, aún se menciona que todavía hace falta una arquitectura de confianza global y de herramientas listas para implementar para construir sistemas compatibles en otros países es una barrera real para reabrir de forma segura las fronteras entre países de la UE y terceros países. 

Estableceremos una red global de registros de confianza, un directorio de registros de confianza entre pares. A través del directorio, los gobiernos y las alianzas de la industria podrán buscar otros registros de fideicomisos gubernamentales o de alianzas y decidir en base a la información proporcionada si aceptan sus certificados. También podrán publicar sus propios indicadores a listas de sus propios emisores autorizados, para que otros países los acepten. 

La LFPH también está siguiendo el Plan de Interoperabilidad de Good Health Pass Collaborative (GHPC), esta es una coalición industrial que ha definido los principios y estándares de los certificados COVID.

Comenzaremos con un marco de gobierno ligero para los pares del directorio. Con el tiempo, los pares participantes desarrollarán el modelo de gobernanza, definiendo la evolución futura del servicio.

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