La importancia de la inteligencia de fuentes abiertas
Saburō Ōkita, político japonés, cuenta en sus memorias que su familia se dio cuenta de que la guerra iba mal para su país cuando las «aplastantes derrotas del enemigo» se producían cada vez más cerca. Cómo dijo alguien, la primera víctima de una guerra es la verdad. Aunque, gracias a la inteligencia de fuentes abiertas (Open Source Intelligence u OSINT) es cada vez más difícil manipular la información.
De Malvinas a Ucrania
Voy a hacer una aclaración. Este artículo es sobre la aplicación de los principios de código abierto a otros ámbitos y está publicado en un blog de tecnología. Voy a aplicar una política de mano dura contra los comentarios que intenten introducir temas que nada tienen que hacer aquí.
Mi primera experiencia con la censura fue exactamente hace 40 años cuando la debilitada Junta Militar que gobernaba Argentina decidió invadir las islas Malvinas. Aunque si le preguntan hoy a cualquier argentino de más de 60 la respuesta es que estuvieron en contra desde el principio, lo cierto es que la acción tuvo apoyo masivo.
Con todas las estaciones de televisión y la mayoría de las radios en manos del gobierno, los cables de agencias de noticias internacionales prohibidos y los medios impresos subidos a un nacionalismo que vendía ejemplares, fue fácil mantener la ficción de la victoria segura hasta pocos días antes de la rendición.
Ocho años después Irak invade Kuwait. Ya estaban entre nosotros las cadenas de noticias internacionales que transmitían en directo lo que pasaba. Aunque las fuerzas armadas de los países combatientes controlaban lo que se emitía, era posible sacar algunas conclusiones.
La primera guerra con Internet fue la invasión a Irak del 2003. Todos sabíamos que no había armas químicas y que el motivo principal fue que el presidente Bush (h) necesitaba demostrar a su país que estaba haciendo algo para vengar el ataque a las torres gemelas. Sitios web dentro y fuera de los Estados Unidos se encargaron de difundir las opiniones que los medios tradicionales, por razones comerciales ignoraban.
Entre 2010 y 2012, ya con las redes sociales entre nosotros, se produjo la llamada primavera árabe. Fue una serie de protestas ciudadanas pidiendo mayores libertades. En realidad, el rol de las redes suele sobreestimarse. Los periodistas occidentales se informaban por los tweets escritos por la minoría de la población angloparlante con conexión a Internet. Pero, de todas formas, estamos hablando de la primera cobertura no realizada por profesionales.
Y, llegamos al 2022 y la invasion a Ucrania
Qué es la inteligencia de fuentes abiertas (OSINT)
La expresión inteligencia de fuentes abiertas se refiere a cualquier información que se pueda recopilar legalmente de fuentes públicas y gratuitas sobre individuos, organizaciones o estados. La mayor parte de las veces eso significa información que se encuentra en Internet, pero podemos extenderla a cualquier soporte, ya sean libros o informes en una biblioteca pública, artículos en un periódico o declaraciones en un comunicado de prensa. Lo mismo podemos decir sobre la información que se puede encontrar en diferentes tipos de medios como imágenes, videos, seminarios web, discursos públicos y conferencias.
En el caso del actual conflicto ruso ucraniano, varios sitios web y usuarios de redes sociales se convirtieron en la mejor fuente de información de lo que estaba pasando sin salir de su casa. Sin sensacionalismo, gritos o golpes bajos, analizaron mapas, fotos satelitales,
Tal vez la mejor alternativa para obtener inteligencia de fuentes abiertas sea Bellingcat, un colectivo de periodistas ciudadanos de todo el mundo que no solo publica noticias, sino que además genera soluciones de código abierto como una herramienta para detectar interferencias de radar o una guía para saber cómo verificar el contenido en redes sociales. Además, tienen abierta una dirección de correo electrónico para que los investigadores de inteligencia de fuentes abiertas propongan que herramientas desarrollar.
Y, si quieres convertirte en uno, también encontrarás en el sitio información de cómo hacerlo.
En algún momento de este siglo, 1984 dejó de ser una sátira política para convertirse en un manual de instrucciones. Y, lamentablemente las democracias occidentales no son la excepción. Por eso, es importante este tipo de iniciativas para impedir que quienes tienen el poder eludan sus responsabilidades.