Una tienda para instalar a todas
Uno de los problemas que muchos ven en Linux es la fragmentación, la cantidad de distribuciones, escritorios y formatos de paquetes que hacen imposible saber cuál elegir. Las opciones podrÃan reducirse algo s prospera la idea de crear una tienda para instalar a todas las aplicaciones en todos los escritorios.
Los responsables de las fundaciones GNOME y KDE están conversando sobre la posibilidad de crear una tienda de aplicaciones única en base al formato de paquetes Flatpak
Una tienda para instalar a todas
La absolutamente pésima idea (Más abajo explico el por qué digo esto) incluye la eliminación de los respectivos centros de software y los formatos de paquetes nativos como DEB y RPM.
El objetivo declarado es la promoción de la diversidad y la sostenibilidad en la comunidad de escritorio Linux incorporando la posibilidad de recibir pagos, donaciones y suscripciones en aplicaciones descargadas de la tienda de aplicaciones Flathub. Algunos promotores de la idea son el ex ejecutivo de Google Eric Schmidt, el presidente de GNOME, Robert McQueen; el antiguo director ejecutivo de GNOME y lÃder del proyecto Debian, Neil McGovern; y el presidente de KDE, Aleix Pol.
¿Por qué es una pésima idea?
Podemos discutir por los siglos de los siglos sobre los méritos comparados entre Flatpak y Snap. El punto es que los que descalifican a Snap por su estrecha vinculación con Canonical olvidan que Flatpak es un proyecto originado en Red Hat y, desde el 2012 para acá Red Hat aprovecha su apoyo financiero a diversos proyectos de código abierto para imponer su tecnologÃa sin importar sus méritos. Tenemos por ejemplo la creación del servidor gráfico Wayland cuando X11 todavÃa tenÃa mucho para dar.
De todas formas, los defensores de Flatpak tienen un punto cuando afirman que Snaps está controlado por Canonical la cual obliga a hacer asignaciones de derechos de autor para las contribuciones al formato Snap y la tienda. Cualquiera pude crear su propia tienda de Flatpak sin requisitos.
No es el primer intento de incorporar aplicaciones de pago. Lo intentó Ubuntu con el centro de software de Unity y lo mismo hicieron las distribuciones Linspire y Elementary OS